
¿Que
no se puede viajar a través del tiempo? Bueno, con un poquito de
fantasía, una dosis de imaginación, un chorrito de buen humor y dos
cucharaditas de motivación, todo es posible.
Además
contamos con un elemento imprescindible para este tipo de viajes: una
fabulosa “máquina del tiempo”. Todavía no tiene nombre pero se
lo van a poner los niños.
La
máquina es preciosa. Fijaos qué detalles, no le falta nada. ¿Sabéis
quién ha sido la artista que la ha construido? Pues ha sido Julia
Chamizo, la madre de Juanjo y de María.